Narra la historia de Mary Lennox, una niña inglesa de diez años que, tras la muerte de sus padres en la India, es enviada a vivir con su tío, el señor Archibald Craven, en la mansión Misselthwaite, en Yorkshire. Al llegar, Mary es una niña solitaria, malhumorada y egoísta, acostumbrada a ser atendida por sirvientes y carente de afecto.
Explorando la vasta y misteriosa mansión, Mary descubre un jardín amurallado que ha permanecido cerrado y descuidado desde hace diez años, tras la muerte de la esposa del señor Craven. Con la ayuda de un petirrojo y una llave que encuentra enterrada, Mary abre la puerta del jardín y decide restaurarlo en secreto.
A medida que trabaja en el jardín, Mary se hace amiga de Dickon, el hermano de una de las sirvientas, que tiene un don especial con los animales y la naturaleza. Juntos, transforman el jardín, y con ello, a Mary misma. La niña también descubre a su primo Colin, un niño enfermo y recluido en su habitación, convencido de que va a morir. Mary y Dickon le muestran el jardín a Colin, y la magia de la naturaleza y el amor compartido ayudan a curarlo tanto física como emocionalmente.
La historia culmina con la transformación de Mary, Colin y el señor Craven, todos ellos sanados por el poder regenerador del jardín secreto y las amistades que desarrollan.
El jardín secreto muestra como el amor, la amistad y la conexión con la naturaleza tienen un poder curativo increíble. A través del trabajo en el jardín, los personajes descubren que la vida puede florecer incluso después de la mayor tristeza y pérdida. Mary, Colin y el señor Craven aprenden que el cuidado y la atención hacia los demás y hacia uno mismo pueden transformar vidas. La novela también subraya la importancia de la esperanza y la resiliencia, mostrando que incluso las personas más heridas pueden encontrar un nuevo comienzo y una oportunidad para crecer y prosperar.
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