
La educación social ha evolucionado como un campo interdisciplinario que combina elementos de la educación, la sociología, la psicología y otras disciplinas relacionadas. Su objetivo principal es promover el desarrollo integral de las personas y las comunidades, abordando las necesidades sociales, económicas y emocionales.
En el contexto de la consecución de un mundo más justo y equilibrado, la educación social desempeña un papel esencial. Al centrarse en la formación de individuos críticos y reflexivos, fomenta la comprensión de las estructuras de poder, la desigualdad y la injusticia. Esto permite a las personas reconocer y cuestionar los sistemas y prácticas que perpetúan la discriminación y la exclusión.
Promueve la empatía y la solidaridad, cultivando habilidades interpersonales y sociales que son fundamentales para la construcción de relaciones respetuosas y colaborativas. Al proporcionar oportunidades de aprendizaje experiencial y participativo, capacita a las personas para involucrarse activamente en la resolución de problemas sociales, desde el ámbito local hasta el global.
Asimismo, la educación social ofrece herramientas para la promoción del cambio social y la defensa de los derechos humanos. A través de la sensibilización, la capacitación y la movilización comunitaria, empodera a los individuos para abogar por políticas y prácticas que promuevan la justicia, la equidad y la inclusión.
Las educadoras y educadores sociales intervenimos en los fenómenos de carácter personal que dificultan el desarrollo de las personas, y por otro, como agentes de cambio social, trabajamos para la modificación de las estructuras sociales excluyentes y la cohesión de las estructuras sociales, aportando nuevas perspectivas y variantes que fomenten sociedades más justas y solidarias.
Principios
Atender las necesidades sociales y desempeñar una función social priorizando en sus acciones la acción pedagógica.
Respeto a los Derechos Humanos. Actúa en el marco de los derechos fundamentales enunciados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Justicia social. Derecho al acceso que tiene cualquier persona al uso y disfrute de los servicios sociales, educativos y culturales en un marco del Estado Social Democrático de Derecho y no en razones de beneficencia o caridad.
